Los expertos consultados por nuestro medio coincidieron en que no están las condiciones para tomar esa medida. En todo caso, el presidente del Colmed Araucanía, Marco Cuminao, advirtió que las clases deberían suspenderse si la situación se prolonga.
La tarde del martes, el subsecretario de Redes Asistenciales, Fernando Araos, informó que, producto de múltiples casos de virus respiratorios, la ocupación de camas pediátricas UCI llegó al 91%.
Se trata de una situación particularmente compleja en las regiones de Bío Bío y La Araucanía, desde donde autoridades locales y organizaciones de la sociedad civil han pedido adelantar las vacaciones de invierno.
Para abordar este tema, Radio y Diario Universidad de Chile conversó con varios expertos, entre ellos, el presidente del Colegio Médico de La Araucanía, Marco Cuminao, quien caracterizó la compleja situación que se está viviendo en su región.
“Nosotros estamos acostumbrados, en Chile y en la La Araucanía, a tener un brote de enfermedades respiratorias infantiles iniciado el invierno, pero este año, el brote empezó dos meses antes, eso ya es raro”.
“En segundo lugar, el número de pacientes que consulta por este problema es prácticamente el doble de lo que ha sido normalmente y, el tercer elemento a considerar, es que hay un perfil de gravedad que no habíamos visto nunca en este tipo de enfermedades. Eso significa que muchos niños que son menores de cinco años, están presentando cuadros muy graves que requieren hospitalización en unidades críticas”.
Lo anterior, dice Cuminao, ha generado que en los hospitales de La Araucanía hayan comenzado un proceso de reconversión de camas críticas de adultos, para que las usen los niños y así no se queden sin ser atendidos
“En este momento, toda la región está cubriendo la emergencia y en todos los servicios de urgencia, especialmente en el Hospital Regional de Temuco, que es el hospital más grande, están todas las camas pediátricas básicas ocupadas, todas las camas de intermedio ocupadas y todas las camas UCI ocupadas. Por lo tanto, todos los espacios que se están abriendo son nuevos espacios, incluso, se han abierto camas en la UCI de adultos, hay niños hospitalizados allí”.
Consultado respecto a la posibilidad de que se adelanten las vacaciones de invierno, Marco Cuminao aseguró que esa medida se debe seguir evaluando y que la decisión debe tomarse por región, es decir, teniendo en cuenta la situación sanitaria particular de las distintas zonas de nuestro país.
“Nosotros hemos llamado en esta región a evaluar la suspensión de clases como una herramienta más. Es decir, no partir diciendo: suspendan las clases, porque la verdad es que hay que ver cómo se comporta el virus día a día. Yo creo que hay que tratar de poner el énfasis en la prevención, pero si esto sigue y se prolonga en el tiempo, con seguridad habrá que suspender las clases”, afirmó.
Por su parte, Tomás Lagomarsino, presidente de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, descartó la idea de suspender las clases. A juicio del diputado, no están las condiciones epidemiológicas como para proponer algo así.
“Uno podría plantear el adelantar o incluso extender las vacaciones de invierno, pero, al menos de lo que uno ha estado monitoreando y con esto me refiero monitoreando estadísticamente, no con criterios más desde la perspectiva de lo que uno cree, no debería ser necesario. Lo que sí es necesario es un reforzamiento de las camas generales, de las camas críticas pediátricas en la red, y de una integración acuciosa y bien coordinada de las camas críticas pediátricas entre el sector público y privado”, dijo.
El presidente de la Comisión de Salud agregó que hoy se está en una situación distinta a la del año pasado, cuando recién veníamos saliendo de la pandemia.
“El año pasado vivimos una situación similar producto de que había una cantidad de población pediátrica que estaba virgen a una serie de virus que habitualmente circulan en esa época del año. Desde la perspectiva epidemiológica, lo que estamos viviendo hoy día podría ser menos crítico que lo del año pasado, producto que muchos de esos pacientes pediátricos ya se contagiaron el 2022”, afirmó.
Recomendaciones para la población
Más allá de las eventuales medidas que puedan tomar el Ministerio de Salud o el de Educación, los expertos consultados por Radio y Diario Universidad de Chile, hicieron recomendaciones para la población general.
La exsubsecretaria de Salud y académica de la Universidad de Magallanes, Lidia Amarales, señaló que “lo más importante es que dentro de la población tengamos claro que hay que vacunarse contra la influenza. Sobre todo la población vulnerable, los niños menores, las personas con enfermedades crónicas, porque cuanto más tasas de vacunación tengamos, más protección tenemos todos”.
Por otra parte, Amarales sugirió recurrir a urgencias solo en casos extremadamente graves.
“Lo otro que es importante es el manejo, por parte de la población, de los síntomas en la casa, salvo que haya signos de gravedad, y el uso de antidiuréticos y de abundante líquido. Si es necesario acudir a un servicio de urgencia, eso debería ser a un SAPU o a los servicios de urgencia de los CESFAM, para no atochar los servicios de urgencia de los hospitales”, indicó.
En tanto, el doctor del Hospital Clínico de la Universidad de Chile y especialista en enfermedades respiratorias, Guillermo Zepeda, recomendó medidas para proteger a los menores de seis meses, que son el principal grupo de riesgo del virus sincicial.
“Lo mejor es prevenir y esa prevención se logra tratando de no juntarse con personas enfermas y hacer caso a las recomendaciones que fueron efectivas contra el Covid. Privilegiar siempre los espacios abiertos sobre los espacios cerrados, tratar que el lavado de manos sea lo más frecuente, porque hay que recordar que uno como adulto podría contagiar a un niño”.
Por último, Zepeda mencionó los signos a los que deben estar atentos los adultos, en caso de que el niño o niña a su cargo enferme: “Esto es, hundimiento de costillas, respiración agitada, que se empiece a quejar un niño porque no puede respirar bien, coloración azulada de labios y eventualmente de las manos. Todos esos son signos de que el paciente no está bien y que por lo tanto debería ir a un servicio de urgencia”, advirtió.
Crédito: Fernanda Araneda – Diario UChile