Un millón 292 mil chilenos viven bajo la línea de la pobreza, mientras que el estudio muestra que las regiones de Magallanes, Aysén y Biobío son las que tienen el indicador más bajo, mientras que Ñuble y La Araucanía tienen el índice más alto.
El 6,5 por ciento de los chilenos vive bajo la línea de la pobreza, según los resultados de la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional, Casen 2022, que este jueves dio a conocer el ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson junto a la subsecretaria de Evaluación Social, Paula Poblete.
La medición realizada por el Centro de Microdatos de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile y el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, destaca que un millón 292 mil 521 personas viven bajo la línea de la pobreza.
Esta cifra corresponde a una caída significativa desde la última medición realizada en 2020, donde el indicador llegó al 10,7 por ciento.
En el detalle, la pobreza por ingresos pasó de un 10,7% en 2020 a un 6,5%, la mayor caída y nivel en base a los datos que se tienen desde el año 1990 y que se miden de forma bianual o trianual.
De este grupo, un 2% se compone de pobreza extrema, que registró un 4,3% en la medición pasada, y está compuesto por 397.963 personas. Así, la pobreza no extrema llegó a un 4,5%, es decir 894.558 personas.
“Si bien hay una reducción sistemática de pobreza en el país desde el año 1990, producto de la pandemia los ingresos autónomos de las personas cayeron considerablemente y generó un impacto en el aumento de la pobreza, pese a que los subsidios aumentaron, pero no lograron contener ese aumento de la pobreza”, dijo el ministro Jackson.
El secretario de Estado precisó que la recuperación pos pandemia influyó en el ingreso de las personas y en la inflación, pero que con la suma de todos los factores se concluye que “el resultado final es que pudimos retomar la senda de reducción de pobreza que se venía dando hasta 2011, en este caso con una tasa de incidencia de 6,5 por ciento”.
Jackson indicó que para determinar pobreza por ingresos, se empleó la metodología de medición de la pobreza utilizada en Chile que considera el valor de la Canasta Básica de Alimentos (CBA) como una de las variables centrales para determinar el nivel de la línea de pobreza.
En esto, la encuesta arrojó que entre noviembre 2020 y noviembre 2022, la CBA aumentó 33.6%, en tanto el IPC subió 20,9%.
En el mismo período, la línea de pobreza pasó de $174.131 por adulto equivalente en noviembre 2020 a $216.849 por adulto equivalente en noviembre 2022 (en pesos de cada año), lo que representa una variación de 24.5% en pesos nominales.
Respecto de la pobreza multidimensional que incluye medición en educación, salud, trabajo y seguridad social, vivienda y entorno, y redes y cohesión social, cayó de un 20,3% en 2017 a 16,9% en 2022.
A nivel regional, la mayoría de lugares presentaron una baja en la pobreza multidimensional. Las regiones que presentaron las tasas más bajas de este tipo de pobreza fueron Maule (15%), Biobío (14,1%), Aysén (14%) y Magallanes (6,9%).
En tanto, Ñuble es la que tiene el indicador más alto (12,1%), seguida por La Araucanía (11,6%) y Tarapacá, con un 11 por ciento.
El ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson, indicó que “tanto Araucanía como Ñuble bajan, pero son estadísticamente iguales (…) la novedad, además de la caída de ambas, es que Tarapacá se suma a las tres regiones que están teniendo una tasa de pobreza de dos dígitos”. A eso sumó que en la región del norte, el aumento tiene que ver con la presencia de población migrante.
La encuesta fue realizada entre el 1 de noviembre de 2022 y el 2 de febrero de 2023 en 72 mil hogares de 335 comunas del país y tuvo entre sus objetivos principales conocer la situación de pobreza por ingresos y multidimensional de las personas y los hogares, así como la distribución del ingreso.
Revise los resultados de la Casen aquí:
Fotos de portada: Agencia ATON.
Crédito: Diario UChile