El exsecretario general de la CUT relevó lo que él considera es el tema de fondo: “Que ENAP vuelva a recuperar el negocio del gas, porque la Fiscalía Nacional Económica recomendó que Gasco, Abastible y Lipigas salieran de allí”.
Continúa el debate luego de que se revelaran los costos del programa Gas para Chile. Los gastos de producción, distribución y otros anexos al proyecto dieron un total de $591 millones, por lo que se calculó que cada cilindro costó al fisco cerca de 117 mil pesos con IVA incluido.
El dirigente sindical de la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP), Nolberto Díaz, insistió en que los costos corresponde al programa piloto y puso el foco en lo que él considera es el trasfondo de este asunto: la alta concentración en el mercado del gas y la supuesta colusión en la industria.
“Los ciudadanos tienen que entender por qué llegamos a esto. Llegamos a que la estatal vuelva a recuperar el negocio del gas licuado, porque la Fiscalía Nacional Económica analizó y estudió el mercado del gas licuado y recomendó que Gasco, Abastible y Lipigas salieran de allí”, apuntó en conversación con Radio y Diario Universidad de Chile.
“La misma Fiscalía Nacional Económica, si bien no usó la palabra colusión, señaló que durante ocho, nueve años, desde el 2014 a la fecha, las empresas del gas habían inflado artificialmente los precios del gas licuado, dañando así severamente a las familias chilenas”, añadió.
Díaz además se mostró crítico con figuras políticas de distinto signo, que durante muchos años no abordaron el problema del gas.
“Que los señores diputados y los senadores respondan por qué no ha habido legislación en materia de gas en 30 años. No la ha habido porque si alguien ha hecho lobby para evitar eso, ésas han sido las empresas del gas”.
Asimismo, Díaz aseguró: “Algunos parlamentarios rajan vestiduras por la presencia de ENAP en el negocio del gas licuado, pero no los he visto decir nada contra los abusos de Gasco, Abastible y Lipigas”, afirmó.
Por último, el dirigente sindical apuntó a personeros del primer Gobierno de Sebastián Piñera, que optaron por sacar al Estado de la industria del gas.
“La ENAP hasta el año 2014 entregó el 70% del gas licuado que el país recibía, pero bajo el primer gobierno de Piñera , los señores Ricardo Cruzat, como gerente de ENAP, y Julio Beltrán, también como gerente de ENAP, abandonaron el negocio del gas licuado para entregárselo a los privados. Luego, esos mismos señores terminaron como gerentes de Gasco y los chilenos fueron afectados con una inflada de precios que no hemos conocido en 70 años de existencia de este tipo de gas”, acusó.
Gobierno: “Esa inversión no se puede calcular antojadizamente”
La ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, se refirió este sábado al cuestionamiento que realizaron algunos partidos de oposición sobre el valor del plan piloto. Vallejo realizó un llamado a “no sobreideologizar, además, sin fundamento el debate de la reforma tributaria a partir del piloto “Gas para Chile”, porque aquí no estamos hablando de una competencia entre modelos públicos o privados”.
“En general todas las iniciativas, todos los modelos para el desarrollo económico que hemos propiciado han sido en colaboración público-privada”, afirmó. “El pacto fiscal es necesario, necesitamos un pacto fiscal para poder redistribuir las riquezas (…) los recursos no salen de la nada, se generan gracias al crecimiento económico, pero también a través de la recaudación de impuestos a los que más utilidades generan en nuestro país”, precisó Vallejo.
La autoridad puntualizó que “con Enap se desarrolló un modelo piloto que tuvo una inversión inicial, esa inversión no se puede calcular antojadizamente a partir de la primera distribución” y agregó que “hay que separar los cálculos de lo que es una inversión inicial a lo que puede producir”. Asimismo, explicó que el “modelo al que se ha llegado, a partir de la experiencia piloto, es un modelo que busca poner en el centro el rol de ENAP y asociarse con pequeños distribuidores para alcanzar a llegar a las familias con balones de gas mucho más económicos de lo que están en el mercado”.
Crédito: Fernanda Araneda – Diario UChile